14 nov 2011

Lo que quiero y lo que tengo .-


A mí me gusta el pelo liso, siempre he querido tener el pelo liso y sólo me fijaba en cortes de pelo liso, de hecho todo el mundo que conocía o veía por la calle tenía el pelo liso, justo lo que yo quería tener.

Tenía tal fijación por el pelo liso que cada vez que me cortaba el pelo pedía que al secármelo me lo alisaran. Y era feliz durante ese momento efímero en el que hacía lo que quería con mi melena lisa perfecta.

Mi pelo es rizado pero cuando llegaba a la peluquería y me preguntaban qué quería hacerme en el pelo, sólo podía darles respuestas que nada tenían que ver con mi pelo, quería el pelo de otro, el corte de otro, quería algo que a mí por como soy no me quedaría bien.

Tras varios años de lucha por alisar mi pelo rizado opté por rapármelo, luego lo llevé muy cortito, porque a mí me ha gustado siempre el pelo liso y lo tengo rizado, muy rizado, desde que vivo en la costa más rizado aún, no sabía qué hacer con él y me lo cortaba muy corto para no tener que preocuparme de este asunto cada mañana. Porque es muy cansado tener que cambiarte cada mañana para ser otra persona que no eres tu.

Hasta que llegó el día que de puro agotamiento dejé de preocuparme por el pelo que quería tener entonces empezó a crecer el pelo que tenía. Estaba tan concentrada en otras cosas que lo dejé crecer y crecer sin preocuparme de él.

Una mañana me levanté, me miré al espejo y me vi. Por primera vez en mucho tiempo, me vi tal y como soy.

Y ¿sabes qué?, no tengo el pelo liso como se supone que hay que tenerlo, pero es mi pelo y estará conmigo hasta que decida caerse, así que mejor que me guste más que cualquier otro.

2 comentarios:

Unknown dijo...

Parece que hables de mí. Yo he pasado años entre tijeras, navajas, líquidos de alisado, tijeras para vaciar, planchas... un día lo tiré todo a la basura y ahora llevo unos años "quitándome". Mi pelo (asilvestrao totalmente) lo agradece, aunque creo que es rencoroso y está más rizado que nunca, y yo aún me levanto algún día con unas ganas de pillar unas tijeras...

Luisa Martina Fernández Chavero dijo...

He de confesar que anoche estuve a puntito de hacer una V de Vendetta con el mío....Luego caí en que llega el invierno.