13 nov 2017

Gorro de lana .-



Tengo un gorro de lana imprescindible. 

A mi gorro le gusta ajustarse bien a mi cabeza y taparme las orejas, aunque a veces, según el día, las dejo fuera.

A mi gorro le gusta mucho pasear, incluso lloviendo, porque así no hay mucha gente y puede caminar tranquilo bajo el paraguas.

Ah sí, no te lo he dicho pero mi gorro es un gorro tímido. Le gusta el silencio, le gusta mucho hacerlo todo con el tiempo que requiere cada acción y le encantan las conversaciones a dos en lugares pequeños. Porque el ruido le molesta.

¿Eso es importante?. Sí, verás como es importante. 

Podrías pensar que mi gorro es un tanto asocial, pero en realidad es todo lo contrario. 

Es un gorro responsable. Es un gorro que se preocupa por los demás. Y lleva muy mal eso de que haya personas que piensan tan solo en sí mismas. 

Mi gorro necesita que todo esté bien, porque si no se pone triste, se encoge y deja de ser útil... como gorro.

Es lo que tienen los gorros de lana cuando lloran.

Si ves a mi gorro un día por ahí, le puedes acariciar, eso le gusta.

Incluso te lo puedes poner, porque le gusta meterse en otras cabezas que no sean la mía...
A veces conmigo se aburre como es natural.

Pero recuerda que es para mí imprescindible.

Así que me lo tendrás que devolver o quedártelo para cuidarlo mucho.

O cambiármelo por el tuyo, si es que tienes un gorro.

Porque siempre viene bien llevar el gorro de otro, aunque sea por un rato.

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